Una semana negra para las empresas de Elon Musk

Todos podemos tener un mal día, pero si eres una figura como Elon Musk, con tantas responsabilidades, una serie de problemas puede convertir un simple mal día en una semana catastrófica, donde parece que el universo entero está en tu contra.

Tesla en el ojo de la tormenta. La compañía de vehículos eléctricos se ha convertido en blanco de las protestas debido a la participación de Musk en los recortes de la Administración Trump. La semana comenzó con una fuerte caída del 15% en las acciones de Tesla el lunes. Sin embargo, con el paso de los días, los inversores han sido más benévolos, lo que ha permitido que Tesla recupere parte del terreno perdido.

No obstante, las protestas no se limitaron únicamente a las acciones. Según ABC News, varias propiedades y vehículos de Tesla fueron objeto de vandalismo, lo que ha generado preocupación acerca de la seguridad y reputación de la marca. Donald Trump se refirió a la situación calificando a los manifestantes como «terroristas domésticos» y advirtió que los responsables serían castigados, declaración recogida por BBC.

Ciberataque a X. En un contexto donde X es un importante canal de comunicación para Musk y el gobierno de EE.UU., la red social sufrió caídas de tráfico el 11 de mayo. Musk anunció que X estaba bajo un importante ciberataque. «Estamos siendo atacados masivamente, es una operación grande y coordinada o incluso un país», publicó el magnate.

Según Wired, el ataque fue atribuido en Telegram al grupo hacker propalestino Dark Storm Team. Sin embargo, tras un análisis, se descartó la implicación de Ucrania, a pesar de las afirmaciones de Musk. La investigación reveló que no todos los servidores de X estaban adecuadamente protegidos contra ataques DDoS debido a deficiencias en la aplicación de las medidas de seguridad de Cloudflare.

Fracasos en SpaceX. El antecedente de una semana complicada fue el fallido octavo vuelo de prueba de Starship, que terminó desintegrándose sobre el Atlántico, al igual que su predecesor. Los restos del cohete interrumpieron el tráfico aéreo en Florida y el Caribe, afectando a más de 240 vuelos comerciales.

Además, Musk enfrentó la cancelación del lanzamiento de la misión Crew-10 a solo 40 minutos del despegue. Esta misión era clave para relevar a los astronautas Suni Williams y Butch Wilmore en la ISS, después de que un fallo en el Starliner de Boeing los dejara en la Estación Internacional. Está previsto que el Falcon 9, encargado de poner la Dragon en órbita con su tripulación, despegue el 14 de marzo si todo marcha bien.

Desacuerdos en la política de Washington. La influencia de Musk en la Administración Trump podría estar menguando. Un encuentro particularmente tenso tuvo lugar en la Casa Blanca entre Musk y figuras importantes del Partido Republicano, como Donald Trump y Marco Rubio, durante una discusión sobre políticas de recortes.

Según The New York Times, Musk sugirió reducir drásticamente los presupuestos para ciertos programas federales, incluyendo aquellos del Departamento de Transporte. Rubio criticó las propuestas de Musk, calificándolas de «ignorantes» y acusándolo de priorizar intereses empresariales sobre las necesidades de la ciudadanía.

Imagen | Flickr (Ted Eytan, Gage Skidmore)