Los nómadas digitales de Estados Unidos tienen claro su destino europeo: la península ibérica

Trabajar en una playa de Bali o un escondido paraje de Costa Rica era hasta hace poco un sueño casi inalcanzable para muchos profesionales altamente cualificados. Estos, comúnmente llamados de cuello blanco, vieron en 2020 un cambio drástico en la forma de trabajar.

El teletrabajo experimentó un auge sin precedentes, creando una migración de profesionales, especialmente estadounidenses, que buscan establecerse en lugares más acogedores sin renunciar a los atractivos salarios que les ofrece su país de origen. Para 2025, la península ibérica ha emergido como el destino favorito de estos nómadas digitales.

Portugal y España en el punto de mira. En el último año, la web de expatriados Expatsi llevó a cabo una encuesta entre 113,363 estadounidenses que contemplaban la posibilidad de abandonar Estados Unidos para trabajar de forma remota en otras partes del mundo.

De estos encuestados, un 68% se mostró interesado en Europa como su destino soñado para ejercer de nómada digital. Portugal y España se destacaron como las opciones predilectas, incluso frente a un endurecimiento en las políticas migratorias de ambos países. Les siguen Reino Unido, Canadá, Italia, Irlanda, Francia, México, Nueva Zelanda y Costa Rica, cerrando así el top 10 de destinos deseados.

Razones para dejar Estados Unidos. Entre las motivaciones expresadas por los estadounidenses para dejar el país, destacan la búsqueda de nuevas experiencias y el crecimiento personal con el 61% de los casos, aunque esto representa una caída de más del 10% con respecto a 2023.

No obstante, la percepción de un Estados Unidos cada vez más conservador (reflejada en el 56% de las respuestas) y un entorno político altamente polarizado (53%), se han convertido en razones de peso que han ido en aumento en el último año. Esta tendencia también se refleja en el incremento de solicitudes de residencia y ciudadanía entre estadounidenses que desean dejara su patria en 2025. Un 48% de los encuestados menciona la violencia armada como uno de los motivos para buscar una nueva vida en el exterior.

El cuarto motivo más relevante (48%) para abandonar la llamada «tierra de la libertad» es, irónicamente, la búsqueda de «diferentes libertades». Aquellos que esgrimen esta razón buscan mudarse a países donde se permita la aceptación de relaciones homosexuales (60%) y matrimonios del mismo sexo (56%). También destacan el derecho al aborto (58%), la libertad para la autodeterminación de género (44%) y la legalización del uso terapéutico y recreativo del cannabis como libertades deseadas por estos expatriados.

¿Quiénes desean vivir en la península? Los nómadas digitales que planean mudarse desde Estados Unidos en los próximos meses son, en su mayoría, profesionales con pareja (44%) y personas solteras (28%). Un 28% de ellos son familias con hijos. La mayoría de aquellos que consideran este estilo de vida son jóvenes de entre 25 y 44 años (39%). Sin embargo, también hay un notable porcentaje de profesionales con edades comprendidas entre los 55 y 65 años. 30% de estos ha manifestado su intención de jubilarse en sus futuros países de residencia.

Los datos revelan que el 68% de los encuestados tiene como objetivo dejar Estados Unidos lo antes posible. Un 12% planea hacerlo en un periodo menor a seis meses, mientras que un 54% proyecta su mudanza antes de 2026.

España: un país acogedor para nómadas. Los requisitos para obtener un visado de nómada digital varían según el país. En el caso de Portugal, se necesita demostrar:

• Ingresos mensuales estables: equivalentes a cuatro veces el salario mínimo interprofesional portugués (aproximadamente 3.480 euros al mes).
• Ahorros demostrables: un mínimo de 36.480 euros.
• Trabajo remoto: se debe ser empleado de una empresa extranjera o trabajar de manera autónoma.
• Duración: el visado inicial es por un año, con posibilidad de renovación anual.

En contraste, los requisitos en España son algo menos exigentes:

• Ingresos mensuales: equivalentes al 200% del salario mínimo interprofesional español, es decir, un ingreso estable de al menos 2.368 euros mensuales.
• Trabajo remoto: se requiere demostrar una relación laboral con una empresa extranjera o tener clientes internacionales, con una antigüedad mínima de 3 meses y una experiencia profesional verificable de al menos 3 años.
• Requisitos legales: no tener antecedentes penales y disponer de un seguro médico privado válido en España.
• Duración: el visado tiene una validez inicial de un año, con opciones de prórroga hasta cinco años.

Imagen | Unsplash (Anastasiia Nelen)