Adquirir un yate es uno de los lujos favoritos de los millonarios, pero algunos optan por vehÃculos un poco más singulares como los submarinos privados. Estos navÃos compactos pueden lanzarse desde embarcaciones de mayor tamaño, ofreciendo la oportunidad de explorar el océano desde una perspectiva absolutamente única.
En los últimos años, han surgido varios modelos de submarinos privados con diferentes rangos de precios y caracterÃsticas. Por ejemplo, el modelo Nemo supera el medio millón de euros, mientras que aquellos con un presupuesto más generoso pueden elegir el Triton 660, que cuesta más de 2,5 millones de euros.
El submarino de lujo para los más ricos
Entre estas dos opciones se ubica el Super Falcon 3S, un submarino personal con un precio cercano a los 2 millones de euros. Su principal caracterÃstica es su diseño, que se asemeja poco a sus competidores, ya que recuerda a un avión que se desliza bajo el agua.
Este diseño distintivo se refleja en el nombre de la empresa creadora, DeepFlight, que se traduce al español como «Vuelo Profundo». Con espacio para un máximo de tres personas, cada una de ellas disfruta de un sistema completo de controles, permitiendo que cualquiera a bordo pueda pilotarlo. AsÃ, una persona con experiencia puede permitir al propietario del submarino tomar los mandos para disfrutar de una experiencia más inmersiva.
Desde un punto de vista técnico, el Super Falcon 3S es impulsado por un sistema de propulsión eléctrica. Funciona con baterÃas de fosfato de hierro y litio que generan 14 kWh (18,7 CV) de potencia, permitiendo que el submarino avance a una velocidad de unos 4 nudos (7,4 km/h).
Aunque la velocidad es modesta, es comparable a la de otras embarcaciones similares. La prioridad es brindar un paseo seguro por el fondo del océano, en contraposición a las altas velocidades de los barcos militares o de transporte.
La seguridad es primordial, por lo que el submarino está equipado con varios sistemas para contingencias. Incluye un dispositivo de flotación de emergencia para regresar a la superficie y un sistema de protección de profundidad para evitar alcanzar niveles peligrosos.
Además, cuenta con dos sistemas de oxÃgeno independientes y un sistema de soporte vital que puede operar durante 72 horas, tiempo suficiente para que un equipo de rescate localice el submarino si surgiera algún problema que impidiera su retorno a la superficie.
Aunque los productos de DeepFlight están dirigidos principalmente a los más adinerados, el Four Seasons Resort en Maldivas posee uno de estos submarinos. Los huéspedes del exclusivo hotel pueden pagar un extra para disfrutar de una experiencia marina a bordo del Super Falcon 3S en el atolón de Baa.
Imágenes | DeepFlight
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