El 1 de junio de 2021 marcó un momento crucial: un nuevo alimento recibió aprobación. Aunque los insectos son parte de nuestras dietas desde hace milenios, ese dÃa la Unión Europea los etiquetó como «alimento seguro». De hecho, estos han sido ingredientes habituales en muchos de nuestros alimentos diarios. En 2019, una empresa de Japón decidió lanzarse de lleno al mundo de los insectos, haciendo del polvo de grillo su componente principal.
Y ahora, ha quebrado.
Insectos > Ganado. La UE no innovaba realmente. Desde hace miles de años, los insectos son un alimento común en Asia, América y algunas regiones africanas. La UE veÃa en ellos un recurso alimenticio del futuro, rico en proteÃnas y nutrientes, cuya huella de carbono es mÃnima comparada con la del ganado.
Por ejemplo, una vaca requiere 8 kg de alimento para incrementar un kilo de peso, y solo se usa el 40% de su carne. En cambio, 1 kg de carne de grillo necesita solo 1,7 kg de alimento y se aprovecha el 80% del insecto. Antes del anuncio de la UE, varios paÃses europeos ya regulaban los comestibles a base de insectos, destacando particularmente el grillo en sus menús.
Polvo de grillos. Utilizados incluso en proyectos de alimentación en Marte, los grillos eran el centro de Gryllus INC., la empresa japonesa que en 2019 comenzó a producir aperitivos. No se trataba de consumir grillos tostados, sino de usarlos como un ingrediente más.
La estrategia era convertir los grillos en polvo y crear snacks en forma de bolitas, disponibles en sabores como ‘umami’ salado y ‘takoyaki’ (bolitas de pulpo). En su promoción, la compañÃa desplegó un food truck ofreciendo patatas fritas con polvo de grillo, harina de grillo, galletas y otros productos.
Bichoburger. El negocio parecÃa prometedor, tanto que en 2022 la aerolÃnea japonesa Zipair Tokyo firmó un acuerdo para incluir dos platos con polvo de grillo entre sus ingredientes: un plato de pasta con marisco en el que el grillo se integraba en la salsa de tomate, y una hamburguesa con el polvo de grillo mezclado con los ingredientes restantes.
Estos platos tenÃan un costo de 1.500 yenes (unos 11 euros) cada uno, y en los dos primeros meses, se registraron 60 pedidos, según el South China Morning Post.
Gryllus se expandió con otros productos bajo la marca C.TRIA
Todo salió mal. Sin embargo, la fortuna de Gryllus se torció cuando intentaron introducir el polvo de grillo en una escuela secundaria. Las crÃticas surgieron rápidamente en redes sociales, con padres preocupados por la compatibilidad nutricional y las posibles alergias alimentarias.
La compañÃa lo atribuyó a una campaña de desinformación. Takahito Watanabe, el fundador, señaló que «posiblemente, los informes falsos y las teorÃas conspirativas difundidas en redes fueron aceptadas por quienes las leyeron». Pero el daño ya estaba hecho.
La caÃda. Según SCMP, las ventas cayeron drásticamente, dejando a Gryllus con un exceso de inventario que no pudieron manejar. Aunque pidieron subsidios gubernamentales para redirigir el negocio hacia producir grillos como alimento para ganado y acuicultura, el rechazo oficial resultó en su inevitable quiebra.
Sin poder recuperarse, el 7 de noviembre de este año, Gryllus INC. se declaró en insolvencia, acumulando una deuda de aproximadamente 153 millones de yenes, casi 945,000 euros.
El potencial. Watanabe, además de fundador es profesor de biologÃa del desarrollo en la Universidad de Tokushima, justificó su inicio en la empresa debido a la crisis de proteÃnas que se avecina con el aumento poblacional mundial. «CreÃamos que habÃa potencial suficiente para triunfar en Japón», afirma.
A pesar del revés, sigue convencido de que los insectos serán clave en nuestra dieta futura. «No sé cuánto tiempo llevará, pero estoy convencido de que los insectos se incorporarán a nuestra dieta como una fuente de proteÃnas esencial, especialmente cuando nuevas tecnologÃas mejoren su aceptación», sostiene Watanabe.
Alternativas. Optaron por los grillos por su facilidad de crianza, rápida maduración y su aporte de nutrientes como calcio, magnesio, zinc, hierro, vitaminas y fibra. Aunque otros ven a los grillos como una solución alimentaria futura —ya presente en formas como barritas proteicas—, no son los únicos escogidos.
Otro aprobado por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria es el gusano de la harina. Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, también están las langostas migratorias y las larvas de escarabajo del estiércol. Las preparaciones varÃan: congelados, desecados, en pasta y hasta en forma de polvo light.
Muchos sostienen que los insectos formarán parte del futuro alimenticio occidental. Solo necesitamos superar el yuck factor, la repulsión cultural hacia comer insectos.
Imágenes | Fracta, Gryllus INC.
Deja una respuesta