La historia de supervivencia de NVIDIA: El último gigante en pie

En 1998, NVIDIA se encontraba al borde de la bancarrota. El feroz enfrentamiento entre los fabricantes de chips gráficos durante los años 90 y principios de los 2000 llevó al colapso de muchos. Tal como narra Tae Kim en su fascinante libro ‘The NVIDIA Way’, solo la empresa dirigida por Jensen Huang logró sobrevivir en un mercado saturado y aún falto de madurez.

En la segunda mitad de los años 90, había entre 80 y 100 empresas compitiendo en el mercado de gráficos para PC, según señala Kim. Algunas de estas compañías eran reconocidas por los consumidores, como Matrox, 3dfx Interactive, S3 Graphics, ATI Technologies, Hercules, Cirrus Logic, Intel, Trident, Number Nine Visual Technology o Rendition, mientras otras buscaban su lugar en un mercado que en ese entonces era mucho más pequeño que el actual.

Kim sostiene que NVIDIA es la única superviviente porque mantiene su esencia original. La mayoría de las mencionadas ya no existen, y las que permanecen lo hacen bien bajo el paraguas de otras compañías, como ATI Technologies, o han diversificado su presencia en el mercado del hardware gráfico para PC, como Intel.

La perseverancia e intuición de Jensen Huang: Claves del éxito de NVIDIA

Según Tae Kim, Jensen Huang ha sido crucial para que NVIDIA superase sus momentos más difíciles. Muchas de sus decisiones se han inspirado en ‘El dilema de los innovadores’, un libro fundamental para Huang, escrito por Clayton M. Christensen, que argumenta que no invertir en innovación abre la puerta a que otras empresas tomen el liderazgo mediante apuestas arriesgadas.

Las lecciones de Christensen han sido una guía para Huang en la definición de la estrategia de NVIDIA. Sin embargo, Kim destaca que la empresa se mantiene competitiva gracias a dos aspectos fundamentales de Huang: su perseverancia e intuición. En 1998, cuando TSMC, proveedor de chips de NVIDIA, afrontó problemas de producción y la compañía se quedaba sin fondos, Huang persuadió a varios fabricantes de tarjetas gráficas para invertir.

«Nuestra tecnología es de primera. Les ofreceremos un 10% de descuento en nuestra oferta pública inicial cuando salgamos a Bolsa. Solo necesitan aportarnos algo de capital ahora», prometió Huang. Su fe en sus productos y su decisión salvaron a NVIDIA, pero otros elementos contribuyeron a su éxito: su capacidad para identificar y captar talento. Huang siempre ha estado atento tanto al talento recién salido de las universidades como al de sus competidores.

Un ejemplo de esta visión es la contratación de Dwight Diercks. Jensen Huang ya seguía de cerca a Scott Sellers antes de que cofundara 3dfx Interactive. Cuando en 2000 esta compañía quebró y fue adquirida por NVIDIA, Huang preguntó a Sellers: «¿Quiénes son los ingenieros más destacados de tu equipo? ¿Cuáles son las estrellas?» Sellers recomendó a Dwight Diercks, quien finalmente se unió a NVIDIA. Aunque Huang sea el alma mater de su empresa, es evidente que valora enormemente a los profesionales que le rodean.

Imagen | NVIDIA

Bibliografía | ‘The NVIDIA Way’, de Tae Kim