AMD revela su ambiciosa estrategia para chips de IA, pero el software sigue siendo su gran desafío

AMD ha demostrado que puede fabricar GPUs de alta calidad para inteligencia artificial. Sin embargo, competir con NVIDIA sigue siendo una tarea titánica, a pesar de haber presentado una hoja de ruta prometedora. NVIDIA, que ostenta un liderazgo indiscutible en el mercado, no parece estar dispuesta a ceder terreno.

El desafío de AMD no es solo estar presente, sino ser reconocida. Según datos de IDC, NVIDIA controla el 85,2% del mercado de chips de IA, mientras que AMD posee solo el 14,3%. Jon Peddie Research sugiere que NVIDIA domina aún más con un 92% del mercado.

La familia AMD Instinct MI350 abre el camino. AMD continúa desarrollando sus «aceleradoras» para IA. Recientemente, presentó las Instinct MI350, con sus variantes MI350X y MI355X. Estas prometen ser cuatro veces más rápidas que su predecesora y 35 veces más eficientes en inferencia IA, crucial para aplicaciones como ChatGPT. Equipadas con 288 GB de memoria HBM3E, ofrecen un ancho de banda de 8 TB/s y rendimiento de 18,45 PFLOPS en precisión FP4 y 9,2 PFLOPS en precisión FP8.

Instinct MI400 para 2026. La próxima generación de aceleradoras de IA de AMD llegará con la familia MI400, equipada con hasta 432 GB de memoria HBM4 y un ancho de banda de 19,6 TB/s. Su rendimiento alcanzará los 40 PFLOPS en precisión FP4 y 20 PFLOPS en FP8, y estarán integradas en las infraestructuras «Helios», capaces de alojar hasta 72 MI400 y 260 TB/s de ancho de banda total gracias a Ultra Accelerator Link.

Nueva generación de procesadores EPYC Venice. AMD también avanza en su línea de procesadores para centros de datos. Los EPYC Venice, previstos para 2026, basados en la arquitectura Zen 6, ofrecerán variantes con hasta 256 núcleos, un 70% más rápidos que sus predecesores. Estarán disponibles junto a las Instinct MI400, fabricados con el nodo N2P (2 nm) de TSMC.

Helios frente a Oberon. El sistema Helios de AMD competirá con el futuro servidor de IA de NVIDIA, apodado Oberon, que usará GPUs de IA B300 con arquitectura Vera Rubin. Mientras Helios promete 1,4 ExaFLOPS en precisión FP8, NVIDIA no se queda atrás, preparando la arquitectura Rubin Ultra para 2027, que podría alcanzar 5 exaFLOPS.

Una carrera de igual a igual. AMD confía en igualar a NVIDIA en varios aspectos y superarla significativamente (un 50% más) en capacidad de memoria y ancho de banda, elementos cruciales para IA. Sin embargo, NVIDIA no se duerme y prepara innovaciones que podrían dejar atrás a sus competidores.

El futuro con EPYC Verano. AMD planea lanzar en 2027 sus nuevos chips EPYC Verano, que sustituirán a los Venice. Se espera que estas CPUs estén asociadas con las Instinct MI500X y posiblemente utilicen el nodo A16 de TSMC (1,6 nm), cuya producción comenzará a finales de 2026. Detalles técnicos aún están pendientes.

Una competencia vertiginosa. AMD está decidida a no quedarse atrás en esta competitiva carrera por dominar los centros de datos globales. La empresa Crusoe anunció recientemente su intención de invertir 400 millones de dólares en chips de IA de AMD. Incluso Sam Altman, CEO de OpenAI, halagó las nuevas GPUs de AMD durante un evento, destacando su potencial.

Eficiencia y economía de AMD. Las GPUs MI355 de AMD destacan por su eficiencia y costo reducido frente a las ofertas de NVIDIA. Aunque no se han revelado precios, las MI300X de AMD valen aproximadamente 15.000 dólares, mucho menos que las H100 de NVIDIA, que superan los 40.000 dólares.

CUDA: el obstáculo a superar. La batalla de AMD no es solo tecnológica. Mientras sus MI300X superan en potencia a las ofertas de NVIDIA, NVIDIA mantiene la ventaja con CUDA, el estándar industrial para desarrolladores de aplicaciones de IA. Aunque AMD ha avanzado, el software sigue presentando desafíos que dificultan la adopción de sus tecnologías.

Desarrollo de ROCm como esperanza. AMD presentó su plataforma ROCm 7, que promete ser 3,5 veces más potente que su predecesor y superar a CUDA en ciertos aspectos. No obstante, todavía queda camino por recorrer para que los desarrolladores puedan utilizar plenamente el potencial de los chips de AMD, haciendo del software una prioridad crucial.

Imagen | AMD