El Gobierno de los Estados Unidos, por medio de la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional (DFC), y el Gobierno de El Salvador concretaron un acuerdo de $1,000 millones para la readquisición de $1,031 millones en bonos vigentes de El Salvador, con un descuento del valor nominal, con el propósito de que la totalidad de los ahorros generados en la operación se dediquen a fundar e instaurar un programa de protección, seguridad y recuperación de los ecosistemas de la cuenca del río Lempa.
Lo que Estados Unidos ha denominado como «la reestructuración de deuda más grande de la historia para la protección de las cuencas hídricas», permitirá que el Gobierno de El Salvador logre ahorros superiores a $352 millones durante el plazo de la deuda, gracias a la amalgama de ahorros inmediatos nominales y notables reducciones en los gastos del servicio de la deuda, según informó la Embajada de Estados Unidos en El Salvador a través de un comunicado de prensa.
El trato entre la DFC y el Gobierno de El Salvador se llegó también gracias a la intervención del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), Catholic Relief Services (CRS), el Fondo de Inversión Ambiental de El Salvador (FIAES) y ArtCap Strategies. En su comunicado, la embajada notificó que JPMorgan Chase Bank, N.A., ejerció el rol de «sole arranger» del préstamo y J.P. Morgan Securities LLC actuó como «dealer manager» para la readquisición de los bonos.
«La DFC, banco de desarrollo internacional del gobierno estadounidense, está brindando $1,000 millones en seguro de riesgo político (PRI), mientras que el CAF ofrece una carta de crédito stand-by de $200 millones (SBLC). La mezcla del PRI de la DFC y la SBLC del CAF refuerza el riesgo de crédito que avala la transacción, lo que impulsa la inversión adicional en las labores de protección y recuperación de ecosistemas en la cuenca del río Lempa en El Salvador. ArtCap Strategies trabajó como asesor financiero y coordinador mundial de la transacción», aseguró la embajada.
En su comunicado, la embajada estimó que el río Lempa, uno de los más extensos de Centroamérica, juega un papel crucial en el bienestar de las ciudades, comunidades y la economía de El Salvador, al suministrar agua potable, además de respaldar la industria, generar electricidad hidráulica y facilitar el riego. «Además, respalda ecosistemas diversos que constituyen una gran porción del patrimonio ambiental del país», mencionó.
Con los ahorros obtenidos de la operación, se prevé mejorar la calidad, volumen y fiabilidad del agua. Además, el proyecto busca fortalecer la resistencia climática, preservar el ecosistema natural de la cuenca y aminorar los riesgos de seguridad hídrica en la región.
El presidente de la República, Nayib Bukele, aseguró que “esta reestructuración de deuda simboliza la acción ambiental más ambiciosa e impactante en la historia de El Salvador». «No solo manifiesta nuestro compromiso con el crecimiento económico, sino que también nos permite alcanzar este crecimiento preservando uno de nuestros recursos naturales más valiosos: la cuenca del río Lempa», mencionó.
El presidente Bukele subrayó: «Con el respaldo de instituciones internacionales, estamos llevando a cabo la operación financiera más grande de su tipo hasta la fecha. Este proyecto de reestructuración de deuda promueve el crecimiento sostenible para nuestras comunidades, robustece nuestra seguridad hídrica y protege nuestros ecosistemas para asegurar el bienestar de esta y las futuras generaciones. Con esta reestructuración de deuda, confiamos en transformar el futuro medioambiental y económico de El Salvador”.
El ministro de Hacienda de El Salvador, Jerson Posada, el jueves 17 de octubre, acompañado por el embajador de Estados Unidos en El Salvador, William Duncan, en una conferencia, declaró que “esta operación no solo tiene un impacto ambiental, también forma parte de la Estrategia Integral de Manejos Pasivos implementada por el Gobierno desde el 2022, para minimizar las necesidades de financiamiento a medio y largo plazo”.
“Gracias a la readquisición de nuestras acciones, logramos una reducción en los saldos de emisiones con vencimientos entre el 2027 y 2052, alisando de esta manera la curva de vencimientos de la deuda del país, lo cual confirma nuestra dedicación hacia la sostenibilidad de la deuda”, aseguró el ministro Posada, catalogando la transacción como “un paso trascendental en la historia al realizar la mayor reestructuración de deuda del mundo para la conservación de un río y su cuenca hidrográfica”.
La Embajada de Estados Unidos en El Salvador explicó en su comunicado que, de los ahorros, $350 millones se asignarán al Programa de Protección y Recuperación del Río Lempa durante los siguientes 20 años, respaldando los esfuerzos nacionales de protección de la cuenca del río Lempa.
«De manera específica, $200 millones, o un promedio de $9.75 millones anuales durante 20 años, financiarán directamente el programa. Mientras que $150 millones, o aproximadamente $7 millones al año, financiarán un fideicomiso. Los fondos del fideicomiso se invertirán y están destinados a convertirse en una fuente de financiamiento constante para el programa más allá del 2044», indicó.
Para la implementación del proyecto, tanto CRS como FIAES administrarán conjuntamente el programa y colaborarán con las agencias gubernamentales clave de agua y medio ambiente para aumentar la seguridad hídrica y la salud de la cuenca, fomentar la protección de la biodiversidad, estimular el crecimiento económico por medio de la agricultura regenerativa y reforzar las habilidades de planificación y gestión en la cuenca del río Lempa.
El programa otorgará subsidios a organizaciones no gubernamentales que operan en El Salvador para apoyar estos objetivos y se prevé que las primeras subvenciones se liberen en 2025. El programa estará gestionado por una junta directiva de siete miembros que incluye un representante del Gobierno de El Salvador, uno de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y cinco representantes no gubernamentales, según la embajada.
Scott Nathan, CEO de DFC, resaltó: “Desde su creación, DFC ha sido pionera en la esfera de las reestructuraciones de deuda. El anuncio de hoy presenta la primera reestructuración de deuda del mundo para la protección de las cuencas hídricas y la seguridad hídrica. Esta operación protegerá recursos esenciales mientras respalda la economía de El Salvador y promueve el crecimiento de un sector privado dinámico que generará más oportunidades para que los salvadoreños encuentren empleo en sus comunidades».
En el comunicado de prensa de la embajada se mencionó que, además, el Gobierno de El Salvador se ha comprometido a constituir una entidad en la zona para supervisar la protección y recuperación de la cuenca del río Lempa; aprobar un Plan Nacional de Recursos Hídricos Integrados; establecer un sistema de monitoreo de datos de recursos hídricos para la cuenca del río Lempa; crear protocolos para la emisión de permisos de uso de agua; establecer un mecanismo de retroalimentación pública y de quejas por violaciones a la Ley Nacional de Recursos Hídricos y la Ley Ambiental; contribuir al proceso de toma de decisiones mediante el desarrollo de normas para calcular los costos relacionados con los servicios de agua potable y saneamiento; y declarar 75,000 hectáreas de zonas de recarga de acuíferos protegidas a lo largo de la cuenca para 2044.
Deja una respuesta