Mientras en España buscábamos maneras alternativas de calentar nuestras comidas sin recurrir a la electricidad, en el despacho oval de la Casa Blanca se vivÃan momentos de gran tensión entre Donald Trump y Jeff Bezos, según reportaba Fox News.
Todo comenzó cuando se filtró un documento interno de Amazon, que exploraba la posibilidad de desglosar el impacto de los aranceles en los precios de sus productos. La Casa Blanca no tardó en reaccionar, y fue el propio Trump quien decidió llamar a Bezos para discutir el asunto.
Amazon bajo el reflector. La chispa que encendió el debate polÃtico fue un informe interno de Amazon revelado por Punchbowl News. Este documento analizaba la opción de detallar los costos adicionales derivados de los aranceles en el precio final de los productos, tratando estos costes como si fueran impuestos o gastos de envÃo.
Con esta iniciativa, Amazon pretendÃa acercarse a la estrategia de competidores como Shein y Temu, quienes planean ajustar los precios de los productos enviados a EEUU debido a los aranceles impuestos a China y desglosar dichos costos en los precios.
La reacción de la Casa Blanca. Como detalló la BBC, la Casa Blanca no tardó en manifestar su descontento. La secretaria de prensa, Karoline Leavitt, expresó en una rueda de prensa la molestia de Trump por el contenido del informe, tachando las intenciones de Amazon como «un movimiento hostil y polÃtico». Añadió: «¿Por qué Amazon no hizo esto cuando la administración Biden alcanzó niveles récord de inflación en 40 años? Esto es otro motivo para que los estadounidenses compren productos nacionales».
Leavitt fue más allá, mencionando un artÃculo de Reuters de 2021 que acusaba a Amazon de colaborar con «el brazo propagandÃstico chino» para censurar reseñas de un libro con discursos de Xi Jinping.
En una entrevista con CNBC, Howard Lutnick, secretario de Comercio de EEUU, calificaba la decisión de Amazon de «absurda». «Un arancel del 10% apenas modifica los precios», afirmaba, refiriéndose al porcentaje arancelario estándar. También comentó que solo influirÃa en productos no producidos en EEUU, como el mango, ignorando que, según Statista, el 71% de lo vendido por Amazon se fabrica en China y está sujeto a aranceles de hasta el 145%.
La intervención de Trump. La polémica propuesta de Amazon llegó a oÃdos de Trump, quien decidió contactar directamente a Jeff Bezos para disuadirlo, a pesar de que Bezos ya no es el CEO oficial de Amazon.
Donald Trump, en declaraciones posteriores, afirmó que Bezos accedió a no seguir adelante con la iniciativa. «Jeff Bezos fue muy amable. Resolvió el problema rápidamente y tomó la decisión correcta. Es una buena persona», afirmó Trump, según el Washington Post. La rápida rectificación de Bezos no sorprendió a muchos, dado su historial de gestos hacia Trump, incluidas significativas donaciones para su investidura y la influencia en la lÃnea editorial de su periódico.
Amazon se repliega. Tras la llamada entre Trump y Bezos, Amazon defendió su posición a través de sus redes sociales, asegurando que las ideas del informe eran meramente consideraciones preliminares de un equipo que gestiona Amazon Haul, que vende productos de bajo coste fabricados en China. La empresa subrayó que «esto nunca fue considerado para la página principal de Amazon y no se ha aplicado en ninguna de sus plataformas».
Luego de la llamada, la portavoz Karoline Leavitt suavizó su tono respecto a Bezos y Amazon, diciendo «No comentaré sobre la relación del presidente con Jeff Bezos». La relación, que ha estado tensa desde la primera administración de Trump debido a las tarifas postales de Amazon, parece haber encontrado un respiro.
CaÃda y recuperación de las acciones de Amazon. La reacción del gobierno ante el informe provocó un descenso del 2,3% en las acciones de Amazon, por temor a represalias de la Administración Trump.
No obstante, tras calmarse la situación, las acciones de Amazon lograron recuperar su valor de mercado habitual, continuando su estabilidad.
Imagen | Flickr (iafastro, Gage Skidmore)
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