La llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos ha generado un gran número de debates, especialmente en cuanto a su impacto en las empresas lideradas por Elon Musk. Uno de los casos más peculiares es el de Tesla, cuyo CEO ha apoyado la eliminación de las ayudas para la compra de vehÃculos eléctricos.
Lo que podrÃa parecer una desventaja para Tesla, en realidad, no lo es tanto. La compañÃa tiene una posición tan dominante en el mercado estadounidense que, si alguien necesita un impulso para vender sus coches eléctricos, es la competencia. Con esta perspectiva, no sorprende que Musk haya donado hasta 119 millones de dólares a la campaña de Trump.
Actualmente, el gobierno de Estados Unidos ofrece hasta 7.500 dólares de ayuda para la compra de vehÃculos eléctricos, cifra que Trump ha calificado como una «estafa verde». Este término se ha utilizado para advertir a los fabricantes que planea reducir o incluso eliminar estas ayudas.
Sin embargo, esta medida no es bien recibida en California. Este estado es históricamente el que más coches eléctricos ha adquirido, implementando polÃticas para promover la movilidad eléctrica.
California desafÃa a Tesla en el mercado eléctrico
California lidera con creces el mercado de coches eléctricos en Estados Unidos. Según el Departamento de EnergÃa, en 2023 registró 1.256.646 vehÃculos eléctricos, siendo muy superior a otros estados como Florida y Texas.
La ventaja sobre otros estados se refleja en que solo Nueva Jersey, Nueva York y Washington superaron los 100.000 vehÃculos eléctricos matriculados en un año, además de los mencionados.
California es considerado un estado progresista. Los Demócratas ganaron las últimas elecciones con un 58% de los votos, mientras que los Republicanos obtuvieron el 38%. Fue una de las pocas victorias contundentes de Kamala Harris sobre Trump.
California, un bastión Demócrata, ha promovido la venta de vehÃculos eléctricos durante más de 25 años.
El interés de California por los coches eléctricos no es reciente. En 1998, el California Air Resources Board exigió que el 2% de los coches vendidos en el estado fueran eléctricos, con un objetivo del 10% para 2003. Aunque el proyecto fracasó, permitió a Tesla establecerse y crecer.
Tesla pasó de ser un lujo para las estrellas de Hollywood a vender casi dos millones de vehÃculos al año. Su dominio en California sigue siendo fuerte, con un 55% del mercado en septiembre, aunque ha disminuido. La empresa ha vendido más de la mitad de los coches eléctricos en Estados Unidos hasta este año.
Este hecho ha llevado a Elon Musk a oponerse a las ayudas para la compra de coches eléctricos, afirmando que eliminarlas «solo beneficiará a Tesla».
California, no obstante, planea mantener los créditos fiscales para la compra de estos vehÃculos. Según Bloomberg, ya están negociando estos créditos, potencialmente dejando fuera a Tesla debido a su alta cuota de mercado.
La oficina del Gobernador de California ha declarado que buscan crear un mercado competitivo para más fabricantes de automóviles. Sin embargo, no han especificado si la medida afectará a otros fabricantes o cómo se decidirá la concesión de ayudas.
Esta decisión supone un revés para Tesla, cuyas ventas en California han caÃdo un 12,6% este año, mientras que las ventas de vehÃculos eléctricos en general aumentaron un 1%.
Foto | Oliver Plattner y Andreas Rasmussen
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