Donald Trump regresa a la Casa Blanca. El candidato del Partido Republicano ha ganado las elecciones, asegurando asà su segundo mandato como presidente de los Estados Unidos. El exmandatario sumó la mayorÃa de los votos en los cruciales «estados bisagra», superando a su rival, la actual vicepresidenta Kamala Harris.
Trump celebró su victoria en el Centro de Convenciones de Palm Beach, en el sur de Florida, junto a familiares, asesores, empresarios, lÃderes polÃticos y seguidores de su partido. Para lograr su contundente triunfo y superar los 270 electores necesarios, el exlÃder, que gobernó entre 2017 y 2021, se impuso o mantiene una fuerte ventaja en Georgia, Carolina del Norte, Pensilvania, Michigan y Wisconsin, los llamados «swing states», considerados esenciales para asegurar la mayorÃa de los votos.
El Partido Demócrata experimentó un descenso notable en su desempeño en comparación con las elecciones generales de 2020. En ese entonces, Joe Biden, quien decidió no postularse para la reelección tras su bajo rendimiento en el debate televisado del 28 de junio frente a Trump, habÃa salido victorioso en Georgia, Nevada, Pensilvania, Michigan, Wisconsin y Arizona, estados que en esta ocasión fueron esquivos para su vice. Biden solo habÃa perdido en Carolina del Norte, un bastión que los republicanos retuvieron cuatro años más tarde.
Las noticias favorables continuaron durante el «supermartes» para el Partido Republicano, que también obtuvo la mayorÃa en el Senado, lo que otorgará mayor poder a la futura administración. Las victorias claves para conseguir el control de la cámara alta fueron de Bernie Moreno en Ohio, Jim Justice en Virginia Occidental y Deb Fischer, que retuvo su escaño en Nebraska.
Más allá de eso, Trump logró un respaldo popular sin precedentes para un candidato republicano, acostumbrados en las últimas competencias a garantizar su llegada a la Casa Blanca únicamente a través de los votos del Colegio Electoral. Esta vez, además de lograr los electores necesarios para alcanzar el máximo del Poder Ejecutivo, Trump reunió más de 69 millones de votos frente a los 64 millones recibidos por Kamala Harris, quien aguardó los resultados en Howard University, su alma máter. «Logramos una victoria polÃtica histórica», declaró al proclamarse ganador desde Palm Beach ante una multitud.
Retos para Trump
Trump sustituirá a Biden, el 46º presidente en la historia de Estados Unidos. Se enfrentará a una nación muy distinta a la que dejó en enero de 2021 cuando abandonó Washington DC para mudarse a Palm Beach y comenzar a preparar su regreso, en medio de juicios, acusaciones y denuncias de diversa Ãndole. Sin embargo, el mundo entero también ha cambiado drásticamente en los últimos cuatro años.
Al dejar el poder, Trump lo hizo en medio de la pandemia de Covid-19, que detuvo las economÃas globales, salvo la de Estados Unidos, que se mantuvo activa aunque con algunas restricciones sanitarias y un alto costo en vidas. Si bien sus tensiones con China -región que ocultó el inicio del coronavirus al mundo- aumentaron por razones comerciales y económicas, en aquel momento Beijing no hostigaba semanalmente a Taiwán con maniobras militares y simulacros de bloqueos marÃtimos y aéreos, poniendo en peligro la seguridad regional e internacional.
Durante su campaña, prometió imponer aranceles a productos chinos y otras importaciones; reducir impuestos y combatir la inflación, un factor que impidió a Harris seguir los pasos de Biden. Algunas economÃas emergentes deberÃan tomar nota.
Actualmente, Asia vive momentos de incertidumbre por la actividad militar creciente impulsada por Xi Jinping. Japón, Corea del Sur y Filipinas, junto al gobierno democrático de Taipei, son socios estratégicos de Estados Unidos en el océano PacÃfico. Trump podrÃa promover -siguiendo su estrategia de diplomacia directa- una cumbre con el lÃder de la autocracia china para intentar frenar el impulso belicista manifestado en los últimos años. No obstante, estas negociaciones se entrelazarán con temas de interés del Partido Comunista Chino (PCC), como las restricciones impuestas por Washington a Beijing en la compra de microprocesadores, esenciales para el desarrollo tecnológico militar y la hegemonÃa en las próximas décadas.
Otro escenario que Trump prometió resolver rápidamente es la invasión a Ucrania ordenada por Vladimir Putin. ¿Con quién comenzará las negociaciones? O mejor aún: ¿a quién convencerá primero? Será difÃcil que Putin abandone sin condiciones el territorio ocupado, especialmente ahora que cuenta con la ayuda invaluable de su aliado, el dictador norcoreano Kim Jong-un, un viejo conocido del presidente electo. El lÃder ruso tampoco querrá seguir siendo un paria internacional. Los requerimientos se acumulan. Seguramente, Putin exigirá más de lo que Volodimir Zelensky esté dispuesto a negociar o ceder. La guerra lleva eternos y sangrientos 987 dÃas. Las bajas son incontables, pero las fuerzas ucranianas -y su economÃa- están agotadas. El jefe de estado ruso lo sabe. ¿Cómo responderá Europa ante esta nueva coyuntura? Es temprano para preverlo. Por si acaso, Emmanuel Macron, presidente de Francia, fue de los primeros en felicitarlo.
Otro frente en el que tendrá que involucrarse será Medio Oriente. Desde el pasado 7 de octubre de 2023, Israel está en guerra con el objetivo de derrotar a Hamas y Hezbollah, en la Franja de Gaza y en LÃbano, respectivamente. Ambos grupos terroristas son el blanco de Tel Aviv tras sus ataques contra territorio y ciudadanÃa israelÃ. Asesinaron a mujeres, niños e inocentes. Asimismo, Irán, el régimen teocrático que los ha protegido durante años, entró en combate. Trump está familiarizado con las acciones de Teherán. Lo demostró cuando ordenó la eliminación de Qassem Soleimani, el máximo general iranÃ, comandante de la Guardia Revolucionaria Islámica, el 3 de enero de 2020, en Irak.
La victoria de Trump es una mala noticia para el ayatollah Alà Khamenei, a quien parece que su estrategia de «paciencia eterna» y el uso de milicias extranjeras ya no le funciona contra sus adversarios. ¿Se precipitará un conflicto aún mayor en Medio Oriente antes de que el republicano llegue a la Casa Blanca? ¿Cómo podrÃa actuar Teherán contra Israel sin una fuerza aérea a la altura de su poder en los cielos? ¿Qué sucederá con su plan nuclear, programa que Trump paralizó indefinidamente?
Cualquiera sea la elección del régimen iranà antes de la toma de posesión del republicano, Washington ofrecerÃa todo su apoyo a Tel Aviv para su defensa, aunque la administración demócrata esté llegando a su fin. Un ataque total contra Israel serÃa un grave error de cálculo por parte de Khamenei, cuyas opciones son cada vez más limitadas. ¿Qué hará Teherán cuando Trump asuma el poder en enero próximo?
Donald Trump se encontrará con un mundo completamente diferente al que dejó en 2021. Enfrenta tres frentes bélicos muy delicados que podrÃan desembocar en una guerra mundial, esta vez con potencias nucleares en juego. «Voy a terminar guerras, no voy a empezar guerras», afirmó en su discurso de proclamación desde el Centro de Convenciones de Palm Beach. Después de mucho tiempo en la historia, será un presidente en tiempos de guerra. Aunque él no haya iniciado ninguna.
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