El carbón establece nuevos máximos históricos en 2024, con China a la cabeza de las renovables

Un reciente informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha puesto de manifiesto que la demanda mundial de carbón ha alcanzado un récord histórico este año, con un consumo de 8.770 millones de toneladas. China se destaca como el mayor consumidor, empleando un 30% más que el resto de los países combinados.

China. Aunque se ha hablado mucho de la significativa inversión del país en energías renovables, China aún sigue dependiendo en gran medida de los combustibles fósiles. Sin embargo, en 2024, ha diversificado su sector eléctrico, impulsando la construcción de plantas nucleares y aumentando su capacidad en energías renovables.

Respecto a las centrales de carbón, China ha logrado reducir en un 80% los permisos para nuevas plantas durante la primera mitad del año. Además, busca disminuir un 20% las emisiones de las nuevas construcciones y llegar a la mitad para 2027. A pesar de esto, la demanda de carbón para ese año podría alcanzar los 140 millones de toneladas, dependiendo del rendimiento en la generación de energía renovable. El gobierno chino ha hecho una inversión considerable en infraestructura y tecnologías verdes para alcanzar los objetivos climáticos.

¿Qué sucede con el aumento eléctrico? El informe de la IEA prevé que el uso del carbón se mantendrá estable hasta 2027. Esta situación se debe a diversos factores, incluyendo la electrificación de servicios como el transporte y la calefacción, así como la creciente demanda de sectores emergentes, como los centros de datos.

En otros países. La disminución en la demanda de carbón para 2027 dependerá de las políticas implementadas por diferentes naciones, como el Reino Unido, que ha cerrado su última planta de carbón este año.

El informe también menciona economías emergentes, donde el crecimiento económico y demográfico, especialmente en países como India, Indonesia y Vietnam, ha aumentado la demanda eléctrica. Este incremento ha sido impulsado por el uso de carbón en el sector eléctrico.

España en particular. Siguiendo el ejemplo del Reino Unido, España ha cerrado la mayoría de sus centrales térmicas de carbón o las ha adaptado. Originalmente planeado para 2030, este cambio se adelantó para 2025 debido a la efectividad de las renovables, ya que la producción de carbón no superó el 1% en 2024.

En definitiva, aunque los precios del carbón son un 50% más altos que el promedio entre 2017 y 2019, y la producción ha alcanzado su máximo en 2024, el informe sugiere una estabilización gradual. Se pone especial énfasis en Asia, con China, India y Vietnam como principales importadores de carbón, mientras que Indonesia y Australia siguen liderando las exportaciones.

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