Tras meses de especulación, Stellantis ha confirmado oficialmente que la plataforma multienergÃa STLA Small se establecerá en España. Las fábricas de Vigo y Zaragoza están aseguradas para la producción de los coches eléctricos y electrificados más compactos del grupo automovilÃstico.
Además, Stellantis ha anunciado un ambicioso proyecto para modernizar la planta de Villaverde en Madrid, extendiendo su vida útil más allá de la actual producción del Citroën C4.
Este anuncio es crucial para las instalaciones de Galicia y Aragón, que habÃan estado preocupadas por el futuro de sus empleos. En Aragón, la confirmación de que Stellantis producirá allà sus vehÃculos electrificados del segmento B refuerza los planes conjuntos que posee con CATL para construir una gigantesca planta de baterÃas cerca de Zaragoza.
El coche eléctrico que Europa necesita para liderar el mercado
Esperando una movilidad más sostenible, Europa se enfrenta en 2025 a una prueba decisiva. La nueva normativa de emisiones exigirá una reducción significativa del mercado de automóviles de combustión, incrementando, incluso de manera forzada, la presencia de eléctricos e hÃbridos enchufables. Esto podrÃa conllevar una disminución en la producción de vehÃculos con motores de combustión.
Las compañÃas que no sigan esta lÃnea podrÃan afrontar multas millonarias, calculadas a partir de 95 euros por cada gramo de CO2 que excedan (la media de la flota no debe superar los 93,6 gr/km de CO2) y coche vendido. Además, Stellantis se unirá a Tesla para presentar un frente común ante la Unión Europea, equilibrando asà sus emisiones contaminantes.
Con este panorama, Europa tendrá que esperar para ver si los consumidores están dispuestos a pagar lo exigido por los fabricantes por los coches eléctricos más compactos. La aceptación de los vehÃculos en el rango de 25.000 euros será crucial para evaluar si las metas sobre emisiones son realistas o si se han sobrevalorizado.
En ese mercado, los coches eléctricos compactos y de menor tamaño deberán ser lo suficientemente atractivos para ganarse a los futuros compradores. Estos vehÃculos serán producidos por Stellantis sobre la plataforma STLA Small, que permite autonomÃas de hasta 500 kilómetros. Además, esta plataforma, al ser multienergÃa, ofrece opciones hÃbridas (enchufables o no) del mismo modelo.
La adjudicación de esta plataforma a las plantas de Vigo y Zaragoza es significativa, ya que asegura la continuidad de dos fábricas que el año anterior produjeron 890.000 vehÃculos, representando un tercio de la producción nacional, según Cinco DÃas. El diario económico apunta que, aunque no hay cifras oficiales, la inversión de Stellantis en modernizar las lÃneas de Vigo y Zaragoza para su plataforma STLA Small asciende a unos 900 millones de euros, totalizando una inyección de 5.000 millones en España al considerar la nueva planta de baterÃas de CATL en Zaragoza.
Este binomio de producción de coches y baterÃas es una gran noticia para los trabajadores. Más allá de las tendencias europeas, paÃses como Francia están apostando firmemente por vehÃculos eléctricos del tipo que Vigo y Zaragoza fabricarán. No solo se trata de cuántos coches eléctricos se venden en España.
España emerge como un lugar estratégico para la producción de automóviles, que además de tener gran potencial entre los clientes, son de especial interés para los fabricantes. La nueva normativa obliga a incrementar las ventas de vehÃculos eléctricos, lo que incrementará la competencia en los precios más económicos.
La asignación de STLA Small refuerza la competitividad de España en la fabricación de vehÃculos de bajo margen de beneficio. Cuanto más pequeño y electrificado es un coche, menor es el margen para los fabricantes. España temÃa que parte de esta producción se trasladara al este de Europa, Marruecos o TurquÃa.
Al igual que con Stellantis, el Grupo Volkswagen ha confirmado que Martorell será el centro de producción para sus automóviles eléctricos más pequeños. Esto complementa con una planta de baterÃas multimillonaria en Sagunto. Los costes laborales y energéticos de España son un atractivo para fabricantes que enfrentan conflictos significativos en Italia o Alemania, donde se plantean despidos masivos o cierres de fábricas.
Foto | Stellantis
Deja una respuesta