El turismo en Japón enfrenta un dilema importante. Si el Gobierno quiere cumplir con su ambicioso objetivo de recibir 60 millones de turistas internacionales para 2030, necesita cerrar una brecha significativa en el personal del sector turÃstico, especialmente en un paÃs que lidia con una crisis demográfica y ya experimenta deficiencias en el personal de sus alojamientos.
El paÃs nipón podrÃa tener que ajustar sus expectativas o arriesgarse a dañar su reputación por su célebre hospitalidad omotenashi.
La Cifra Récord: 36,8 Millones. El año 2024 fue un hito para el turismo japonés. La creciente popularidad del destino, junto a la recuperación gradual de viajes tras la pandemia y la depreciación del yen, llevaron a un nuevo récord en número de turistas y gasto. Sin embargo, este afluente de visitantes generó ciertas tensiones con los residentes, como se vio en Fujikawaguchiko, que llegó a instalar una pantalla para ocultar las vistas del monte Fuji.
Los datos del año ilustran el auge del turismo: Japón acogió 36,8 millones de turistas internacionales en 2024, superando los números pre-pandémicos de 2019, con un gasto total de más de 51.000 millones de dólares. Incluso 2025 inició con fuerza, rozando los 3,8 millones de visitantes extranjeros en enero, según la Organización Nacional de Turismo.
La Meta Ambiciosa: 60 Millones. A pesar de las cifras impresionantes de 2024, las autoridades japonesas buscan más. Quieren continuar esta tendencia ascendente y alcanzar los 60 millones de visitantes extranjeros para 2030, con la esperanza de que esto conlleve un gasto monumental. No obstante, esta ambición ha generado debate.
A finales de 2024, una columnista de The Japan Times cuestionaba si el paÃs está realmente preparado para tal afluencia de turistas. En respuesta, The Mainichi sugirió en un editorial que Japón deberÃa cambiar su enfoque hacia una mayor calidad sobre cantidad de turistas.
La Cuestión: ¿Es Viable? Esa es la pregunta que se plantea el Asia Pacific Institute of Research (APIR). ¿Qué recursos y capacidades necesita el sector para gestionar una demanda tan elevada? El análisis de APIR revela que, al seguir la tendencia actual, Japón enfrenta un déficit significativo de personal si persigue su meta de 60 millones de turistas.
El resultado es claro: el sector carecerá de cientos de miles de trabajadores, con un vacÃo laboral especialmente agudo en hoteles y servicios de comidas.
El Déficit Estimado: 536.000. APIR estima que el sector turÃstico enfrentará un déficit de 536.000 empleados, una cifra preocupante para manejar el flujo de turistas esperado para 2030.
Este número cobra sentido cuando se consideran dos tendencias contrastantes: el esperado aumento en el flujo de turistas y la anticipada reducción del 1,9% en las plantillas de hoteles y servicios de comidas para 2030.
El DesafÃo del Empleo. Según The Asashi Shimbun, para cubrir la demanda y enfrentar la escasez de mano de obra, el sector necesitarÃa aumentar su productividad en un 2,8% anual. Además, las empresas deben enfrentar la caÃda demográfica que ha reducido la población en edad laboral.
Otro obstáculo es atraer nuevos trabajadores, ya que muchos hoteles ya sufren un déficit de personal significativo. En 2024, Nikkei informó sobre negocios que operaban con menos del 20% del personal necesario. «Ya experimentamos una falta de personal en la industria», admitió Masaru Takayama, de una agencia de viajes de Kioto, a This Week in Asia.
«Durante la pandemia, muchas empresas despidieron empleados que ahora han encontrado nuevas carreras en otros sectores. Aunque el turismo ha reactivado su actividad, hemos perdido a esas personas y sus valiosas habilidades», añadió Takayama.
Una Sugerencia: 40 Millones. Además de señalar el déficit de personal, APIR propone reconsiderar el objetivo turÃstico nacional, sugiriendo una reducción a 40 millones de visitantes, asà como un cambio de enfoque.
En lÃnea con The Mainichi, la tesis es priorizar no la cantidad de turistas, sino su gasto. «En vez de centrarnos en cuántos nos visitan, debemos incentivar un mayor gasto», opina Yoshihisa Inada de la Universidad de Konan.
La Inquietud: ¿Qué Implica? Según APRI, con 40 millones de turistas, Japón aún superarÃa en un 8% la cifra de 2024, pero el déficit de mano de obra se reducirÃa a aproximadamente 138.000 personas. Un aumento anual de solo el 0,7% en productividad serÃa suficiente para cubrir la diferencia.
La pregunta crucial es si renunciar a 20 millones de turistas adicionales significa perder grandes ingresos. El Gobierno aspira a un gasto turÃstico de 15 billones de yenes (alrededor de 101.000 millones de dólares). APRI sugiere que con 40 millones de visitantes, el gasto por turista deberÃa pasar de 227.000 yenes (1.400 €) en 2024 a 375.000 yenes (2.300 €).
Conclusión: «Es Posible». Inada, optimista, afirma: «Si mejoramos la oferta turÃstica y aumentamos el gasto por visitante, se puede lograr». Aumentar el gasto por visitante, que ya creció entre 2019 y 2024, requiere, según APRI, mejorar la productividad mediante la digitalización y la robótica.
En su esfuerzo por fortalecer el sector turÃstico, Japón también deberá enfrentar otros retos, como las molestias generadas por el alto flujo de visitantes en áreas como Kioto, el monte Fuji, los alrededores de Tokio y la capital. Además, debe considerar los efectos del turismo extranjero en el turismo interno, que ha encarecido los precios en el paÃs.
Un Sector Clave: la Aviación. No es la primera vez que un análisis señala el problema de personal en el turismo japonés. Durante el auge postpandémico, Bloomberg indicó que para recibir 60 millones de turistas en 2030, Japón también necesitará más pilotos.
El razonamiento es simple: más visitantes requieren más vuelos. Japón cuenta con 7.100, pero el Gobierno estima que se necesitarán al menos mil más, un desafÃo considerando que muchos pilotos actuales están cerca de la jubilación.
Imagen | Geoff Henson (Flickr)
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