El «Milagro Inditex» en declive: El crecimiento impetuoso llega a su fin

Inditex ha confirmado los temores de muchos: ya no es la maquinaria de crecimiento incesante que se conocía, y ahora se enfrenta a una fase más consolidada, alejándose de los días de crecimiento de dos dígitos que antes eran la norma.

Relevancia del momento. Este primer trimestre es un punto decisivo para el gigante gallego. Las ventas apenas aumentan un 1,5%, en contraste con el 7,1% del año previo, mientras que el beneficio se mantiene en un exiguo 0,8%.

Estas cifras son más típicas de cualquier firma textil europea, no del imperio que solía lograr resultados excepcionales.

Números claves. Los datos son contundentes:

• Ventas alcanzan 8.274 millones…
• …muy por debajo de los 8.380 millones que los analistas habían anticipado.

Este es el crecimiento más tímido desde 2018, dejando de lado el impacto de la pandemia. El mercado bursátil reacciona sin piedad: las acciones caen más del 4% y retroceden a los 46 euros en mínimos intradía.

El trasfondo. Tres factores contribuyen a esta inesperada normalización.

1. Un euro fuerte merma las ventas internacionales, causando un impacto del 3% que la empresa no pudo anticipar.
2. Las intensas lluvias en España (responsables de un 15% de las ventas globales) han reducido la demanda de ropa primaveral.
3. Por primera vez en años, los costes operativos crecen más rápido que los ingresos.

Más allá de los números. Los balances revelan una preocupación mayor: Inditex está perdiendo eficacia. Las existencias aumentan un 6,3%, una desviación de su famosa estrategia de mantener stocks reducidos.

La posición financiera neta disminuye un 7,3%, indicando que la empresa ya no gestiona todas las variables con la misma destreza de antes. Queda por ver si esto es un fenómeno pasajero o si tiene implicaciones más profundas.

No obstante. El segundo trimestre trae un alivio: las ventas crecen un 6% entre mayo y junio. Sin embargo, es solo la mitad del 12% observado el año pasado en el mismo periodo.

La recuperación es palpable, pero sigue siendo típica de una empresa común, no de un fenómeno extraordinario como antes.

Últimas noticias. La salida de José Arnau, vicepresidente y mano derecha de Amancio Ortega durante 24 años, marca el fin de una era. Roberto Cibeira asume el relevo en una compañía aún fuerte, pero ahora más terrenal.

La evolución está completa: Inditex ha evolucionado de ser un fenómeno empresarial a una multinacional estable, pero predecible. El milagro ha dado paso a la era de la madurez.

Imagen destacada | Inditex