Una Infraestructura Criminal en España que Llegó a Contar con un Bot de Atención al Cliente

José Luis Huertas, conocido como Alcasec, no era un simple hacker. A sus 21 años, había establecido «Udyat – El ojo de Horus», una plataforma que vendía datos robados con un nivel de sofisticación comparable al de gigantes como Amazon o Netflix.

Relevancia. La captura de Alcasec ha revelado la existencia de un «mercado de datos» paralelo en España. Allí, cualquiera podía adquirir información personal segmentada, similar a un servicio de suscripción convencional. Su modelo de negocio se asemejaba al de una startup legítima.

Antecedentes. Aunque en los medios ha sido retratado como un joven hacker desde su arresto en 2023, la situación es más intrincada. Alcasec había montado una estructura empresarial completa:

• Almacenamiento en la nube.
• Bot de atención al cliente en redes sociales.
• Segmentación de datos por perfiles.
• Incluso un sistema de facturación en criptomonedas.

El Funcionamiento. La plataforma ofrecía «consultas personalizadas» a través de un bot cifrado. Los usuarios podían adquirir paquetes de datos específicos sobre personas o entidades. Un comercio electrónico moderno, pero vendiendo información personal como DNI, números de teléfono y datos bancarios.

Su «oferta» incluía:

• Directorios telefónicos completos.
• Datos de clientes de operadoras.
• Abonos de transporte de Madrid.
• Registros de mascotas.
• Bases de datos de centros educativos.
• Información del Registro Civil.

Las Cifras. Alcasec generó 1.866.175 euros a través de su plataforma. En sus dispositivos se encontraron 32,943 bitcoins. Entre diciembre de 2021 y febrero de 2022, recibió notificaciones de criptomonedas valoradas en 365.000 euros.

Detrás del Telón. La implicación del exsecretario de Estado Francisco Martínez no fue fortuita. La red utilizaba su figura para parecer una consultoría de seguridad legítima, blanqueando su actividad criminal mediante estructuras corporativas.

La Policía describe la organización como «una amenaza estructural con capacidad de desestabilización económica y estratégica». No es una exageración. Habían logrado vulnerar instituciones públicas sin ser detectados, convirtiendo sus bases de datos en un supermercado online.

Reflexión. Lo más alarmante es la escalabilidad del modelo. Alcasec no necesitaba hackear cada vez que requería dinero. Había automatizado el proceso: los sistemas robaban datos de forma continua, la plataforma los clasificaba automáticamente y el bot atendía a clientes 24/7. Un negocio que operaba por sí solo.

La diferencia entre Alcasec y una empresa tecnológica convencional es que una ofrece servicios legales y la otra comercia con datos ilegales, específicamente, tu vida privada.

Imagen destacada | Policía Nacional