La frase «los ojos son el espejo del alma» podrÃa cobrar un nuevo sentido cuando se trata de analizar cómo hombres y mujeres perciben su entorno al caminar de regreso a casa por las noches. Un grupo de cientÃficos de la Universidad Brigham Young (BYU) decidió investigar las diferencias de percepción entre géneros, enfocándose en el movimiento ocular de las personas. Utilizando mapas de calor, lograron identificar las áreas del camino que capturan la atención de hombres y mujeres al regresar a sus hogares.
Los resultados hablan por sà mismos.
¿Qué atrae tu mirada? Para desarrollar su estudio, los investigadores de BYU llevaron a cabo una prueba sencilla: entrevistaron a casi 600 estudiantes, divididos en un 56% de mujeres y un 44% de hombres. Se les mostró un conjunto de 16 imágenes capturadas en diferentes campus, incluyendo la Universidad BYU, la Universidad de Utah, entre otras. Luego, los participantes debÃan imaginarse caminando solos en esas áreas y señalar las zonas que más captaran su atención.
Utilizando la herramienta de mapas de calor de Qualtrics, los investigadores analizaron la respuesta de los participantes a fotos tomadas en diversas condiciones de iluminación y ambientes, desde escenarios diurnos iluminados naturalmente hasta entornos nocturnos y opresivos.
¿Qué se reveló? Las respuestas variaban significativamente según el género. Las mujeres tendÃan a enfocar su atención en la periferia de las imágenes, buscando identificar «posibles riesgos de seguridad». Los hombres, en cambio, solÃan mirar hacia adelante, fijándose en puntos de luz o el camino directo hacia su destino. El patrón de observación de las mujeres reflejaba una exploración detallada del perÃmetro, prestando atención a zonas oscuras y arbustos.
¿Qué observaban realmente? Los mapas de calor incluidos en el estudio, publicado en 2024 en Violence and Gender, ilustran claramente estas diferencias. Las imágenes analizadas variaban desde entornos de «alto atrapamiento» con poca luz hasta escenarios de dÃa y noche con diferentes niveles de seguridad percibida. Generalmente, las mujeres enfocaban más los bordes de las fotos, mientras que los hombres mantenÃan la vista en su trayecto.
¿Qué implica esto? Aunque el estudio presenta ciertos sesgos, como señala Lee Chambers de Male Allies UK, por estar basado en respuestas obtenidas en EEUU y sus posibles influencias culturales, ofrece una visión reveladora. Según Chambers, el comportamiento de los hombres de mirar hacia adelante podrÃa estar influido por un condicionamiento social que asocia esta acción con la confianza.
En esencia, para BYU, este estudio demuestra que la experiencia de caminar a casa por la noche «no es lo mismo» para hombres y mujeres. La investigación evidencia visualmente cómo las mujeres realizan un constante análisis de su entorno cuando caminan en la oscuridad, una práctica que, según el estudio, forma una parte integral de su experiencia.
¿Por qué importa? Según Robbie Chaney, profesor de salud pública de la BYU y uno de los autores del estudio, los mapas de calor son una representación visual de las percepciones y acciones de las personas en estos contextos. Aunque esperaban encontrar diferencias, el contraste observado fue significativo. Para Ayssa Baer, otra autora del estudio, este trabajo tiene el potencial de fomentar la conciencia sobre estas diferencias de percepción.
«Con datos concretos, espero que podamos abrir diálogos que resulten en acciones significativas», expresa la investigadora. Aunque se trata de un estudio teórico, los autores esperan que sirva como base para que aquellos encargados de diseñar espacios universitarios consideren las distintas experiencias y necesidades de seguridad de hombres y mujeres.
Imágenes | BYU y Florian Marette (Unsplash)
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